En el Senado el diálogo será más crucial «a priori» que en la Cámara de Diputados, dónde siguen «llegando por arte de magia» cada día más diputados pintados de violeta. Resulta que para la nueva composición de la cámara alta, ningún bloque tiene hoy mayoría propia, mientras que Martín Menem «sigue sumando voluntades garrochistas», con «El Jefe» KM  

Recordemos que en el Senado Nacional se necesitan 37 del total de los 72 senadores para logar la mayoría. La fuerza opositora «Fuerza Patria» si bien será «el bloque opositor más grande por el momento», ya que está dividido internamente entre facciones kirchnerismo vs. otros peronistas, hoy no tiene la fuerza para rechazar lo que podría venir luego de una insistencia seguida por un veto del presidente Javier Milei.

Vemos que el árbitro a hoy lunes 9 de Diciembre de 2025 en el Senado, será el bloque compuesto por La Libertad Avanza (LLA) y el PRO ( y aliados «tipo Kueider»?), que sumarían hoy unas 24 bancas, más que suficientes para sostener los vetos presidenciales, pero no para aprobar leyes sin consenso.

Es importante no confundir dos tercios (2/3) que significan un total de 48 senadores para temas cuyas decisiones, requieren lo que se denomina «una mayoría calificada de la totalidad de los miembros», con otros temas donde que solo se requieren «ese 2/3 pero de miembros los presentes» (Ej: para rechazar o sostener un veto). Ese es el número, reitero, que varía según la asistencia a la sesión, aunque se suele interpretar como 2/3 de los 72 escaños, es decir, 48 votos. 

Estimo por los tiempos que con un paquete de 6 normas, y en sólo 12 días, en principio tendría chances de darle media sanción al Presupuesto 2026. Si bien no tiene mayoría propia, tras unas elecciones legislativas muy favorables en un Congreso donde en general y de todas maneras, no cuenta con mayoría propia, a pesar de haber triplicado su presencia en el Palacio Legislativo.

Lamentablemente para nuestra democracia ganó el voto ausente, ya que la participación electoral en las elecciones legislativas del 26 de octubre pasado fue solo del 67,85%: la más baja desde el retorno a la democracia en 1983.

El período de extraordinarias es hasta el 30 de diciembre, según lo estipulado por el gobierno en un principio. Para ese periodo de sesiones propuso que se traten el Presupuesto 2026 y la denominada ley de “Inocencia Fiscal” (donde el trámite legislativo exige el aval de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Legislación Penal, mientras que el Presupuesto 2026 solo debe pasar por la primera), el Compromiso nacional para la estabilidad fiscal y monetaria, la⁠ ⁠Modernización laboral, la ⁠Reforma del Código Penal, y la⁠ ⁠Adecuación del régimen de presupuestos mínimos para la preservación de los glaciares y del ambiente periglaciar. Algo imposible -considero -, que se logre hasta el 31 de diciembre próximo.

Martín Menem ya tendría la orden para una convocatoria a la Cámara de Diputados para el próximo día 17 de diciembre para tratar todos estos proyectos mencionados. Obviamente que desde lo técnico, recalco que es algo imposible, habría que ver el estado o adelanto en las respectivas Comisiones, etc.

2026: ¿El año del Veto?

Para confirmar un veto, Javier Milei (atribución que tiene como titular del PEN) y de esa manera convertir un proyecto en ley, necesita en el Senado de una mayoría especial de dos tercios de los votos de los miembros presentes. Aclaremos además, nuevamente aunque ya lo hemos repetido tantas veces, que el número exacto de senadores necesario depende del quórum del momento de la votación, es decir, de cuántos senadores estén presentes en la sesión.

Sin embargo, para que la insistencia del Congreso prospere, ambas Cámaras (Senadores y Diputados) deben alcanzar la misma mayoría calificada de dos tercios. (*ver el artículo 83 de la Constitución Nacional

La Vicepresidente de la Nación, Dra. Victoria Villarruel – quien vale la pena recordar que sigue creciendo en imagen positiva -, si bien no es Senadora Nacional es quien organiza las sesiones y coordina los debates. Solo vota en caso de que exista un empate y ahí «su voto vale oro o tierra» para el gobierno seudo libertario de Javier Milei. Pero su cargo es mucho más importante que el de un Senador. Es más, a partir de mañana 10 de diciembre cuando Javier Milei cumpla ya sus 2 años de mandato, queda como sucesora natural para culminar el mandato presidencial, ante cualquier inconveniente que pudiera ocurrirle al primer mandatario. De modo tal, que las palabras críticas como las del tal Luis Juez, no tienen asidero más allá del medio de prensa «entongado» (*nueva palabra sumada al vocabulario porteño y más allá), y sus cada vez menos televidentes, siendo ya también una situación social a la que ya no escapa ningún medio tradicional.

Ya le ha tocado desempatar a la Sra. VP Villarruel, por el tema de la Ley Base luego del voto del ultra kirchnerista entrerriano, Edgardo Kueider, quien «por arte de magia», o por estar ligado a ese dinero con el que fue detenido a la postre en Paraguay (*situación que dirimirá la justicia, aunque incumpliendo el llamado «principio de inocencia», ya fue apartado del Senado y la prensa adicta al «mileísmo térmico» sigue haciendo un silencio que aturde!).

En ese momento, aún la VP Victoria Villarruel, no había sido atacada de manera feroz en silencio por Karina Milei («El Jefe»), o del entorno de funcionarios de Casa Rosada, ni por los enjambres de «trolls termos mileístas»; que la empezaron a atacar a los pocos meses, o cuando empezaron a ser rechazados los vetos del hombre «que viaja a Oslo» para acompañar a María Corina Machado a recibir el Premio Nobel de la Paz. ¿Consuelo emocional?. No tengo idea ni soy experto en esa materia. También concurrirán los presidentes del Ecuador, Paraguay y creo que el de Panamá.

VILLARRUEL PUEDE CRECER EN ESTA TORMENTA QUE SE AVECINA EN EL SENADO

Antes de ingresar en este tema -del que además seré breve y lo dejaré para otro artículo -, sigamos con lo medular del asunto y recordemos y analicemos algunas cosas más. Reitero en que todo dependerá de los acuerdos que pueda alcanzar LLA de Milei y el peronismo violeta, ya que la composición actual del Congreso obliga al oficialismo a buscar apoyo de otros espacios.

Reitero: ni en Diputados ni en el Senado disponen de los votos suficientes como para alcanzar el quórum, o para garantizar la aprobación de sus proyectos citados.

En este contexto, los gobernadores provinciales adquieren un rol central en las negociaciones, dado que muchos diputados responden directamente a los mandatarios de sus provincias y no a las estructuras de los partidos nacionales. Esta tendencia hace que las negociaciones se den mucho más en la Casa Rosada que en los despachos del Palacio Legislativo.

Analizamos por ejemplo al bloque llamado «Provincias Unidas«, y quizás se presente hoy como el caso más representativo de estos famosos «saltos de garrochas marca Kueider», o por obras provinciales, u otras cosillas.

Sucede que en este bloque confluyen legisladores alineados con los gobernadores de Santa Fe (Maximiliano Pullaro), Jujuy (Carlos Sadir), Córdoba (Martín Llaryora) y Chubut (Ignacio Torres). Además, integran este espacio políticos de otros espacios diversos.

También hoy (si, hoy!), nos encontramos al socialista Esteban Paulón, al radical (el ex kirchnerista de la 125), Martín Lousteau,  o a la ex libertaria Lourdes Arrieta; mientras que la conducción hoy (*si, reitero, hoy) quedó en manos de Gisela Scaglia, la dirigente del PRO santafesino, referente del sector del gobernador santafesino Maxi Pullaro, que si bien tuvo algunos rumores «garrocheros», pero es lo que hasta hoy, hay que ser muy cautos, estarían marcando la orientación y los intereses que tendría el bloque de «Provincia Unidas».

¿Y por dónde anda la UCR?: Por ahora, por Mendoza

En la Unión Cívica Radical (UCR), la impronta provincial viene de la mano de Alfredo Cornejo, un socio de LLA, y quién viajó a Canadá en ese viaje que realizó Karina Milei sin su hermano Javier, donde participaron de una reunión con los magnates de la Minería. Por Alfredo Cornejo, justamente la presidencia del bloque de la UCR lo tiene su discípula mendocina Pamela Verasay. En el bloque de la UCR conviven, obviamente, los radicales de Corrientes de Gustavo Valdés, y los del chaqueño Leandro Zdero.

Siempre hablando de la Cámara de Diputados, desde dónde el gobierno quiere empezar los proyectos principales, también tenemos al bloque hasta hoy llamado «Innovación Federal«, que agrupa a los diputados salteños vinculados a Gustavo Sáenz y a los misioneros de Hugo Passalacqua.

Y como refería en un artículo anterior, en «Unión por la Patria», donde se encuentran los catamarqueños de Raúl Jalil del bloque «Elijo Catamarca» y los tucumanos de Osvaldo Jaldo de «Elijo Catamarca», votarán con Milei acorde a los beneficios de su socio violeta.

Es decir que el peronismo llega dividido también a la Cámara de Diputados, y ahí es donde «está la pesca de votos de los de LLA» donde ya resultaron ser muy amigos y hasta socios del peronismo según vimos en algunos Frente Electorales en la últimas Legislativas. No solo en el PRO algunos se siguen pintando de violeta y traicionando a un electorado que marcó como reproche, el mínimo de participación como decía al inicio: solo votó el 67,85% del padrón. Un golpe duro al sistema democrático.

Es así que el mileísmo y aliados violetas, tiene casi dos semanas (doce días hábiles), para conformar las comisiones, llevar los temas, dictaminar los proyectos de ley, exponerlos en el recinto, y obtener media sanción en cada una de las cámaras.

Es por ello que no se entiende bien el viaje de Javier Milei a Oslo por la entrega del Premio Nobel de la Paz a María Corina Machado, pero como dijo el mismísimo presidente tantas veces, es probable o todo será manipulado por la cara de visible de «el Jefe» Karina Milei, confirmando nuevamente que la democracia en Argentina no estaría marchando al 100%, ya que gobierna una persona que nadie votó.

Es rarísimo porque durante este tiempo, las Comisiones: ¿Cuánto tiempo tendrían para debatir?. Claramente, si se hicieran los debates democráticos, la poca cantidad de días, dificultaría sobremanera las posibilidades de obtener consensos. ¿O ya tendrán todo solucionado a velocidad supersónica como la de los aviones F-16 que recibió LLA y que vienen de un ofrecimiento al peronismo en 2023?. Esperemos que no, por el bien de la institucionalidad, y de un «ya basta de las Kueider´s sospechas».

Mientras tanto, Victoria Villarruel vivirá momentos claves en el Senado Nacional, dónde creo que el 2026 será el año del «reinado de los vetos de Milei». ¿Saldrá con chances de unirse a algún partido político de caras al 2027?. Lo charlamos en otro artículo, como les decía.