Desde la asunción del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, muchas veces hemos visto como medios de prensa de Latinoamérica - que supuestamente no deberían tener “intereses talibanes” - lo criticaban duramente, al igual que al presidente saliente Donald Trump. Con la pandemia desatada o conocida en 2020, y a medida que se aproximaban las elecciones en EEUU, esas críticas brutales se intensificaron contra el estadounidense. Respeto al brasileño, solo “se aplacaron” - en el caso de medios de Argentina - cuando el kirchnerismo chavista empezó a ocupar los primeros puestos del lamentable ranking mundial de contagios y muertes a causa del coronavirus.
Donald Trump seguirá siendo el “perseguido mediático” de la mayoría de las corporaciones de prensa del mundo, hasta que finalice el juicio político, al que la poderosa líder demócrata de 80 años Nancy Pelosi, lo somete por segunda vez y ya fuera del cargo y “con mucho olor” a revancha personal.
La idea del “impeachment” no sería otra que la “del temor demócrata” de que Donald Trump se presente a las elecciones en el próximo año 2024 por los demócratas o por fuera. Lo que se busca es proscribirlo políticamente.
Lo cierto es que mañana 20 de enero y con unas elecciones “muy sospechadas” de fraude y denuncias cruzadas, asume con 78 años a cuestas, quien en definitiva ha sido certificado como presidente electo de los EEUU: Joseph Robinette Biden Jr., más conocido como Joe Biden.
Un presidente débil de salud y condicionado a intereses que deberá satisfacer
Así asumirá Joe Biden quien jamás se habría imaginado llegar a presidente de los EEUU ya que a su larga carrera política, vino la urgencia demócrata de vencer a los republicanos y con un presidente de color como Barack Obama, las chances eran muy superiores.
Y así se le esfumaron a Biden ocho años de su vida, y pese a no tener la fortaleza física y mental (ha tenido lapsus) de Trump, recibió ayuda desmesurada del “establishment” de los medios de prensa y plataformas digitales. No nos olvidemos que sigue censurado en las redes sociales.
Lo cierto también es que le estarán mirando el sillón de la Casa Blanca a Biden, “esos intereses” voraces con una vicepresidenta Kamala Harris, de corte más socialista como “plan B”.
Bienvenido a “las máquinas picadoras de carne”, Mr. Jair Bolsonaro
El presidente de Brasil - pos Trump - seguirá siendo el blanco predilecto de los medios de prensa cuya mayoría tienen un pensamiento socialista en Latinoamérica.
Jair Bolsonaro es el presidente de la sexta potencia mundial sumando el poderío económico y militar. Se entiende a los medios de prensa que lo castigan con sus periodistas estrellas eternos, por su rédito económico como empresas.
Muchas veces “por ciertas cuestiones” también han apoyado a dictadores de derecha. Pero quienes realmente dan pena, son algunos periodistas ignorantes “que se suben a un tren”, pero a fin de mes siguen cobrando su mismo salarios. Idiotas útiles suele llamarse a quienes adoptan o siguen ese comportamiento patético.
¿Seguirá el legado familiar de la familia Trump como los Kennedy?
Es algo muy incierto ya que los ataques “al apellido Trump” y a sus empresas recién comienzan.
Es de destacar que pese a todo, Donald Trump se va mañana antes del mediodía a Florida (no estará presente convalidando a Biden) y lo hace con una popularidad del electorado que es la envidia de cualquier político del mundo.
Los senadores y líderes republicanos no “desean condenarlo y congraciarse” con los demócratas, porque el electorado “los observa” y desean tener un futuro político.
Como tantas veces escribí, no se trataba de un señor multimillonario llamado “Donald Trump”. Se trataba del avance del socialismo del Siglo 21 de Latinoamericana y de una colonización del Partido Comunista Chino (PCCh) que viola los Derechos Humanos, y en donde estos mismos periodistas no pueden trabajar, con suerte son detenidos o los “desaparecen”.
Por último, y para algún malpensado o fanático, si a futuro Donald Trump es imputado de un delito, o de estar implicado en la toma del Capitolio del 6 de enero pasado, seré el primero en condenar sus acciones. Por el momento no tengo información que ello halla sucedido. Decir “que hubo fraude electoral”, no es sinónimo de “ordenar o incitar” a la toma del Capitolio como hoy nos quieren imponer desde muchos medios de prensa.
Hasta pronto!
Jorge W. Rausch McKenna
*Analista Político *CEO Consultoría *Abogado *Periodista
Twitter: @JorRausch
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